Los aranceles impactan más en Europa que en EEUU

Miguel Ángel Valero

Comienza el simposio Jackson Hole, donde como todos los años desde 1982 se espera con interés la comparecencia del presidente de la Fed, Jerome Powell, el viernes 22 de agosto, ya que puede dar pistas sobre los diferentes escenarios de actuación.

El equipo de análisis de Activotrade SV señala tres escenarios clave:

  • Escenario base (60%): Powell mantendría un tono cauteloso, insinuando posibles recortes sin confirmarlos; los mercados reaccionarían con estabilidad moderada. 
  • Escenario agresivo (25%): Si adopta un lenguaje firme contra la inflación, podrían subir los bonos, caer las acciones y aumentar la volatilidad.
  • Escenario expansivo (15%): Si sugiere un recorte claro, acciones, criptomonedas y bienes raíces subirían impulsados por expectativas de política monetaria más flexible.

Por su parte, desde Payden & Rygel analizan minuciosamente los últimos datos sobre la inflación en EEUU  en busca de cualquier indicio de los efectos de los aranceles y afirman que “aunque el índice de precios al consumo (IPC) subió un 0,32% con respecto al mes anterior, lo que elevó la tasa interanual al 3,1%, los aranceles no están impulsando la inflación". 

La vivienda representó aproximadamente el 32% del aumento mensual, seguida de un máximo de tres años en los servicios médicos (impulsados por los servicios dentales) y un aumento en los servicios de transporte (liderados por las tarifas aéreas); en conjunto, estas tres categorías representaron más del 70% del aumento del IPC subyacente de julio. El mayor contribuyente relacionado con los aranceles, el mobiliario y los suministros para el hogar, representó menos del 10%. 

El índice de precios al productor (IPP) también subió un 0,9 % en julio, pero solo unas pocas categorías del IPP se incluyen en la medida del PCE subyacente preferida por la Fed, y las más importantes, como la gestión de carteras y los servicios de transporte aéreo de pasajeros, no están impulsadas por los aranceles y es poco probable que se conviertan en presiones inflacionistas duraderas. 

"Por ahora, el fantasma de la inflación impulsada por los aranceles aún no ha llegado", subrayan.

Ventas de renta variable

Pero tras varias jornadas de relativa calma, las ventas en los mercados de renta variable continuaron, afectando especialmente al sector tecnológico. Las actas de la última reunión de la Reserva Federal reflejaron un comité dividido; no obstante, la mayoría de sus miembros mantienen una mayor preocupación por la inflación que por el empleo, lo que reveló una postura más restrictiva de lo previsto y generó incertidumbre en el segmento con mayor recuperación desde el mínimo de abril: la tecnología acumula un avance del 45% desde ese mes y un +12% en lo que va del año.

"Consideramos prematuro hablar de un cambio de tendencia –el S&P 500 retrocede apenas un -1,5% desde máximos– o de una potencial rotación sectorial, aunque los recientes movimientos serían más acordes con este último esquema. Sectores que se habían quedado rezagados han ido a contracorriente, como la salud –+1% en la semana– o un S&P 500 equiponderado que apenas ha retrocedido. En caso de prolongarse el movimiento, bajo nuestro punto de vista, este supondría una oportunidad para incrementar exposición a renta variable pues consideramos que el ciclo económico aún tiene capacidad para continuar", opinan en Banca March

Wall Street cerraba mayormente a la baja –S&P -0,2%; Nasdaq -0,6%–, con la atención ya puesta en el arranque de Jackson Hole, y con nuevos retrocesos asociados a la tecnología, en medio de las preocupaciones por su alta valoración y la sostenibilidad del repunte de la IA, mientras los inversores calibraban los resultados de compañías de consumo y las actas de la última reunión de la Fed. 

En el terreno de los resultados, retroceso en la cotización de Target (-6,3%), pese a superar supuestamente las estimaciones iniciales, en contraste a los avances de TJX (+2,7%) y Lowe´s (+3,3%), tras superar también ambas previsiones. 

En lo relativo a la Fed, las actas mostraron que la mayoría de los funcionarios fue partidaria de mantener tipos sin cambios y que hubo dos discrepantes, subrayando las preocupaciones sobre la inflación y el mercado laboral. Los futuros del S&P 500 rompe la tendencia de los últimos días y sube en estos momentos, aunque marginalmente (+0,05%).

Sesión la de ayer con poca historia en Europa –EuroStoxx 50 -0,2%; Ibex -0,08%–. La excepción la encontramos en el Footsie británico (+1%), índice que alcanzó máximo histórico mientras ignoraba la inflación más alta en el país de los últimos 18 meses. En España, la cautela hizo que brillaran valores defensivos como Redeia (+1,4%), seguido de Iberdrola (+1,2%) y Repsol (+1,2%) frente al retroceso de valores cíclicos como ArcelorMittal (-2,1%).  

Las Bolsas asiáticas caen por tercera sesión consecutiva, esperando a Jackson Hole. Los descensos son en todo caso moderados, a la espera del discurso de Powell que refuerce la senda de recortes de tipos que el mercado espera de la Fed a partir de septiembre. 

Calma chicha en el mercado de bonos a pesar de las actas de la Fed. Aunque el documento reveló la preocupación respecto al impacto de los aranceles en los precios, la tranquilidad propia del periodo estival se hizo presente en la renta fija, con la referencia a 10 años estadounidense cerrando sin cambios en 4,29%. En Europa, la lectura definitiva de precios de julio no acarreó grandes sorpresas, pero fue suficiente para aupar ligeramente al Bund alemán que finalizaba en niveles de 2,71% (-3 p.b.).

En las divisas, el mercado aguarda las cifras de confianza empresarial en ambos lados del Atlántico que se publicarán hoy. Mientras tanto, el dólar continúa recuperando territorio frente al euro tras unas actas de la Fed que apuntan a la inflación como el mayor riesgo actual. Tras finalizar la sesión de ayer casi sin cambios (+0,04%), la referencia euro-dólar se deja un -0,2% en estos momentos hasta situarse en 1,163 EUR/USD. Por su parte, las negociaciones del cruce euro-libra se llevan a cabo sin un rumbo claro, con la cotización posicionándose en niveles de 0,865 EUR/GBP (+0,2% en la semana).

En el mercado del petróleo, se instalaba el ánimo comprador ante el desplome en los inventarios de crudo en EEUU. La semana previa, las reservas del gigante norteamericano se vieron mermadas en poco más de 6 millones de barriles –la mayor caída desde mediados de junio–, lo que permitió a la cotización cerrar con avances del +0,6%. En estos momentos, nuevas alzas que sitúan la referencia Brent en niveles de 67,2 $/barril. 

Por otro lado, los inversores del oro se debaten entre una Reserva Federal más restrictiva y la incertidumbre generada por las amenazas de Trump sobre la gobernadora de la Reserva Federal Lisa Cook y su supuesto escándalo con dos hipotecas. Su dimisión permitiría a Trump alterar el equilibrio de fuerzas en la Fed. El caso suscitó nuevas dudas sobre la independencia de la Fed e impulsó la demanda de activos refugio.

Ralentización económica en la Eurozona por los aranceles

Mientras tanto, la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, anticipa una ralentización económica en el tercer trimestre de 2025 a medida que se diluye el efecto anticipación. La resiliencia mostrada en la primera mitad del año, especialmente en el primer trimestre, se debió en gran parte a distorsiones por el adelanto de exportaciones previo a la introducción de nuevos aranceles. Lagarde señaló que el arancel efectivo promedio tras el acuerdo con EE.UU. se sitúa entre el 12% y el 16%, ligeramente por encima de lo previsto en las proyecciones del BCE de junio, pero muy por debajo del escenario más severo, que contemplaba gravámenes del 20%. En ese contexto, el BCE proyectaba un crecimiento del +1,1% para 2025 en su escenario base, frente al +0,7% en el escenario adverso. Las nuevas proyecciones de septiembre incorporarán las condiciones del acuerdo. Por otro lado, Lagarde instó a Europa a diversificar sus relaciones comerciales y reforzar sus vínculos con socios más allá de EEUU.

La inflación en la zona euro se estabiliza en el objetivo del BCE. El dato final del IPC de junio no deparó sorpresas y confirmó que por segundo mes consecutivo la inflación se sitúa en el +2% interanual, alcanzando así la meta de la autoridad monetaria europea. Por componentes, el principal detractor de la inflación sigue siendo la energía, al caer estos precios un -2,4% interanual y, con ello, retiraron dos décimas al IPC. Frente a ello, los precios de los alimentos siguen registrando avances fuertes (+3,3% interanual y una aportación de +0,6 p.p. a la inflación de la región). En cuanto a la tasa subyacente, tampoco hubo sorpresas y confirmó los niveles de +2,3% interanual, asentada en estos niveles por tercer mes consecutivo y mostrando así estabilidad. Sin embargo, la evolución de los componentes fue alentadora dado que los precios de los servicios se moderaron (+3,2% interanual, siendo así una décima menos de crecimiento y su aportación a la inflación también bajó una décima hasta +1,4 p.p.). Mientras, vimos un repunte en los precios de los bienes que crecieron a ritmos del +0,8% interanual y explicaron así +0,2 p.p. del IPC. En conjunto, datos poco novedosos y que no alteran las expectativas de evolución de la política monetaria del BCE que se mantendrá en modo de pausa tras bajar los tipos de depósito hasta el 2%.

Por otro lado, mejora la confianza de los empresarios en Japón tras el acuerdo comercial con la Administración Trump. Los datos de preliminares de agosto muestran un repunte de la confianza de los empresarios nipones, al situarse el PMI compuesto en 51,9, tres décimas por encima del mes previo. Esta mejora de la confianza se concentró íntegramente en la industria al elevarse el PMI manufacturero en un punto hasta niveles de 49,9 y acercarse así a tasas que apuntarían a una expansión de la actividad (por encima de 50). Por el lado negativo, el PMI de los servicios cayó y bajó hasta 52,7 desde el 53,6 previo, dando muestras de menor fortaleza, pero en niveles claramente expansivos.