En 2024 se inyectaron cerca de tres billones$ en el sector energético, de los cuales casi el 67% se destinaron a energías limpias y el 33% a las fósiles.
La estimación para 2025 es un crecimiento de la demanda de entre el 1,2% y el 1,3%, algo menor que en 2024 (+1,4%) por la desaceleración en la zona euro, las tensiones geopolíticas y el impacto en la economía española.
La industria europea ha logrado reducir en más de un 20% el consumo de gas en 2023 con respecto al periodo 2019-21. Los hogares también lo han bajado en la misma proporción.