Aliki Rouffiac, gestora de Robeco, avisa que puede que se exijan primas de riesgo por inflación sobre la deuda públicas emitida para financiar el gasto militar.
"Europa debe ser más soberana, más responsable de su propia defensa y estar mejor equipada para actuar y hacer frente de manera autónoma a los retos y amenazas inmediatos y futuros".
En cuanto la inversión en defensa, la opinión está dividida: un 37 % la considera insuficiente, un 35% la considera adecuada, y un 20 % la ve excesiva. El 45% considera que el presupuesto que se destina a defensa y seguridad es menos que en otros países del entorno, el 12% que es mayor, y el 43%, que igual.
La Comisión Europea reconoce sin ambages que “en la actualidad, la industria europea de Defensa no es capaz de producir los sistemas y equipos en las cantidades y con la rapidez que necesitan los Estados miembros”.
Si se permite a Rusia lograr sus objetivos en Ucrania, su ambición territorial se extenderá más allá, advierten la Comisión Europea y el Libro Blanco de la Defensa Europea, elaborado por EY.
Más allá de las armas controvertidas, Robeco detecta oportunidades de inversión en las industrias de apoyo no letales que respaldan a los ejércitos y su infraestructura (catering, uniformes, logística, tecnología, financiación, ciberseguridad).
Hay un área de inversión y política pública que necesita un mayor reconocimiento por su papel en el apoyo a la seguridad, la competitividad económica y la resiliencia: un uso más inteligente y menos derrochador de la energía.
El Banco Central Europeo retrasa a 2027 una inflación por debajo del 2%, rebaja sus proyecciones de crecimiento económico, y propugna más gasto en defensa y en infraestructuras para estimular éste.