Un inspirador relato que celebra los valores de la educación a través de las primeras maestras que llevaron la enseñanza a los rincones más olvidados de la Francia rural llegará a las salas de cine españolas de la mano de A Contracorriente Films el 19 de septiembre.
La película, protagonizada por Alexandra Lamy y Grégory Gadebois, fue presentada en la Sección Oficial del BCN Film Fest, donde ambos actores fueron galardonados con el premio a Mejor Actriz y Mejor Actor respectivamente.
La primera escuela está dirigida por Éric Besnard, responsable de películas como Delicioso, Las cosas sencillas, y Pastel de pera con lavanda.
Besnard regresa a la gran pantalla con una emocionante historia ambientada en la Francia rural de 1889, protagonizada por Alexandra Lamy ("Sobre ruedas", "La habitación de las maravillas") y el ganador del César Grégory Gadebois ("El oficial y el espía", "Delicioso"), quien ya ha colaborado con el director en sus dos filmes anteriores.
La película, que atrajo a más de 662.000 espectadores en Francia, nos presenta a Louise Violet (Alexandra Lamy), una maestra que llega a un pueblo de la campiña francesa con la misión de abrir la primera escuela basada en los principios de la República: gratuita, obligatoria y laica. Su llegada se verá truncada por la fuerte resistencia local, en un entorno socialmente reacio al cambio.
Tras explorar el nacimiento de la gastronomía moderna en 'Delicioso', película que se convirtió en una de las sorpresas del cine francés en España en su año de estreno, Besnard se sumerge ahora en la historia de las primeras maestras en la época de la República, mujeres pioneras que llevaron la educación a entornos profundamente conservadores y recelosos al cambio.
“El saber representa una puerta abierta pero también la posibilidad de marcharse”, afirma el director, aludiendo al conflicto central de la película: cómo la educación abre horizontes a la infancia, despertando tanto esperanzas como los miedos en sus padres.
En la Francia rural de 1889, una maestra llega con la misión de implementar la educación obligatoria y gratuita en un pueblo que rechaza el cambio y prioriza el trabajo en el campo. Poco a poco, gracias a su vocación y perseverancia, logra ganarse la confianza de la comunidad y abrir la primera escuela, que cambiará la vida de los niños para siempre.