Mapfre ha celebrado un acto conmemorativo y de inicio de obra de rehabilitación del edificio de Campanar, en Valencia, que ardió el 22 de febrero de 2024 y que provocó una decena de muertos. Este emotivo encuentro, que ha reunido a gran parte de los vecinos, instituciones y empresas que participan en la reconstrucción, ha tenido como propósito honrar la memoria de lo vivido y reafirmar el compromiso de la aseguradora de la comunidad de vecinos y de 24 viviendas.
La ceremonia, celebrada en el solar del mismo edificio, en la calle Poeta Rafael Alberti, contó con la intervención de Ricardo Garzó director general de Mapfre en Este; Enrique Salvador Company, presidente de la asociación de vecinos del edificio de Campanar; y Julia Climent Monzó, concejal de Recursos Humanos, Participación y Acción Vecinal del Ayuntamiento de Valencia.
Durante el encuentro, que comenzó con un minuto de silencio por las personas fallecidas en el incendio, se escucharon palabras de reconocimiento y testimonios que destacaron la resiliencia de los afectados y la unión de vecinos, autoridades, voluntarios y empresas, quienes desde el primer momento brindaron apoyo incondicional.
Ricardo Garzó recordó que este siniestro no solo ha puesto a prueba la capacidad de respuesta de los servicios de emergencia, sino también al sistema asegurador, cuya actuación ha sido determinante en la coordinación, cobertura y resolución de un evento de estas características: “Además de cumplir con nuestra función como aseguradora de la comunidad y de muchas de las viviendas, cumplimos con un fin social, que es proteger el patrimonio y el futuro de las personas. Hoy no solo miramos atrás, también comenzamos a construir el futuro”.
Por su parte Enrique Salvador Company agradeció la solidaridad y ayuda de personas anónimas y entidades. “Mapfre, desde el primer momento ha estado a nuestro lado facilitándonos los recursos necesarios para rehacernos. Además de cumplir con su responsabilidad, Mapfre ha estado permanentemente acompañándonos, ayudando a coordinar y a mediar con el resto de las aseguradoras para que pudiéramos financiar lo que hoy celebramos: el inicio de la rehabilitación de nuestro hogar. Su compromiso y su cercanía han hecho posible que este proyecto, que parecía inalcanzable, sea ya una realidad”.
Julia Climent Monzó destacó que “el Ayuntamiento de Valencia siempre ha estado al lado de los vecinos afectados por el incendio, apoyándoles en los momentos más complicados y difíciles y, también, acompañándolos en los momentos más esperanzadores, como el que hoy compartimos. Hoy celebramos la fortaleza de una comunidad que ha trabajado, sin descanso, en colaboración y contacto permanente con los servicios municipales, para conseguir la rehabilitación del edificio y hacer realidad la recuperación de sus hogares”.
Los tres procedieron a la colocación de la primera losa de reconstrucción de la fachada, un gesto que marca el inicio formal de las obras y proyecta hacia el futuro un espacio renovado y fortalecido.
Las obras, que comenzaron el 4 de julio, 16 meses después del incendio, con un presupuesto de 20 millones€ y un plazo de ejecución de hasta 18 meses, avanzan a "buen ritmo", según la asociación de afectados.
Respuesta inmediata
Mapfre convocó la misma tarde del trágico accidente a su comité de crisis para poner en marcha la gestión de un siniestro tan complejo, en el que la agilidad y la empatía eran muy importantes. La aseguradora se puso sin demora en contacto con cada uno de los clientes del edificio para activar la gestión del siniestro, y reforzó y amplió la atención en la oficina de Valle de la Ballestera 17, aportando un equipo de profesionales para ayudar a todos los afectados por el siniestro y acompañarlos en todo el proceso.
La aseguradora anticipó de forma inmediata el importe correspondiente al valor asegurado de los bienes que tenían en la vivienda, según las cuantías determinadas en cada póliza. Abonó las indemnizaciones correspondientes a la inhabitabilidad de la vivienda incluidas en el seguro de la comunidad, por un lado, y en el seguro del hogar por otro.
Mapfre habilitó también un número de teléfono de ayuda psicoemocional para todos los afectados. Y se involucró en la coordinación entre administraciones y aseguradoras para agilizar cualquier trámite burocrático.
Una vez las autoridades permitieron la entrada al edificio, la compañía puso en marcha una peritación independiente para el cálculo de la indemnización del siniestro y presentó ante la Comunidad de Vecinos varias propuestas de reconstrucción con la cuantía de las indemnizaciones correspondientes.