Ceinsa vaticina un incremento de salarios en puestos técnicos especializados, dificultades para captar talento en competencias emergentes y un trasvase de profesionales desde sectores maduros hacia nuevas industrias.
Las empresas con menos de 100 empleados subirán los salarios un 3,02%; las que llegan a 500 trabajadores, el 3,1%; las que tienen un millar de personas en plantilla, el 3,37%, y las que superan esta cifra, el 2,6%.
La brecha retributiva de género es de un 18,72% (5.175€) en el cómputo anual, lo que significa que las mujeres tendrían que trabajar dos meses más para ganar lo mismo que los hombres.