La morosidad será mayor que en 2024 porque consumo y pymes suponen un mayor riesgo, y la geopolítica afectará a los sectores muy expuestos al comercio internacional.
Los partidos populistas aumentan la incertidumbre política en Francia y Alemania, lastrando las perspectivas de crecimiento a medio plazo de Europa, estimadas en torno al 1,0-1,5%, y que están por debajo del 2,0% previsto para Estados Unidos.
La agencia de calificación pronostica que el déficit se reducirá hasta el 2,5% en 2025, al 2% en 2026 y al 1,8% en 2027.
"El Gobierno alemán está aprovechando al máximo el escaso margen de maniobra de que le permite el llamado freno de la deuda para inyectar fondos públicos en la economía, pero las medidas son insuficientes para hacer frente al gran y creciente déficit de inversión del país", advierten Eiko Sievert, Julian Zimmermann y Elena Klare, analistas de Scope Ratings.
La actual presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, sigue siendo la favorita para un segundo mandato, aunque su disposición a trabajar con los eurodiputados de extrema derecha refuerza a candidatos alternativos como el italiano Mario Draghi, el croata Andrej Plenković, o el rumano Klaus Iohannis.