En 2025 la emisión de bonos verdes, sociales y sostenibles (GSS) superará de nuevo el billón$, respaldada por tipos de interés favorables y la continua demanda de los inversores.
Un análisis de Payden&Rygel subraya que el aumento de los rendimientos de los bonos, en respuesta a un mayor crecimiento, es un buen augurio para la renta variable y el crédito.