OBS Business School, institución perteneciente a Planeta Formación y Universidades, red internacional de educación superior del Grupo Planeta, ha celebrado su quinto y último Encuentro Directivo de 2025 con la participación de Alejandro de Frías, responsable de sostenibilidad en Danone Iberia. Junto a Casilda Güell, decana de la escuela, De Frías ha hablado sobre el compromiso que deben tener las empresas en la lucha por el medio ambiente.
Un objetivo que, junto a la salud de sus consumidores, Danone lleva integrado en su ADN. Hoy en día, no destinar parte de los recursos a cuidar el planeta y a las comunidades en que se opera, no es una opción que puedan permitirse las empresas. Danone lleva más de 100 años trabajando en este objetivo, en parte gracias a la transformación del negocio para adaptarse a las tendencias actuales. De hecho, la misión de la compañía es aportar salud a través de la alimentación de forma respetuosa con el planeta.
Sin embargo, De Frías considera que vivimos en un contexto especialmente retador pues hay que lograr balancear el corto y el largo plazo. “Antes se buscaba la rentabilidad rápida, sin embargo, el retorno de la sostenibilidad no es inmediato”, afirma. Danone trabaja con tres pilares muy claros: la salud de las personas, el bienestar de las comunidades en las que opera y el impacto que genera en el planeta, y De Frías pone como ejemplo proyectos como ‘Fluye’ o ‘Alimentando el cambio’, dirigidos a concienciar a los más pequeños sobre la importancia de tener hábitos de consumo saludables y sostenibles.
Según un informe de la ONU hasta ahora solo se han alcanzado un 17% de los objetivos marcados en materia de sostenibilidad. Danone ha conseguido reducir un 20% sus emisiones de CO2 en granja desde 2017 y, aunque trabaja duro para lograr todos los ODS, se centra especialmente en el aspecto de la salud, la innovación y la gestión de residuos, y anualmente emite un informe de transparencia que contiene información no financiera.
La innovación constante es vital para que la compañía se mantenga a la vanguardia. Por eso cuenta con tres centros de I+D+i en España y Francia, en los que hay laboratorios de fermentos que investigan en diferentes cepas, laboratorios de envases que trabajan en ecodiseños y también plantas piloto que recrean diferentes situaciones de producción. A través de ellos la empresa busca reducir consumos, mejorar la eficiencia y optimizar procesos. Pero conseguir todos estos objetivos no es fácil y por eso De Frías cree fundamental tener una buena formación.
“La sostenibilidad debe ser algo transversal a todo tipo de estudios y las habilidades más sociales e interoperativas son vitales para ir evolucionando hacia diferentes especialidades”, afirma.
Las empresas de gran consumo y del sector agroalimentario son responsables en España del 12% de los gases de efecto invernadero. Esta cifra asciende en el mundo hasta el20%, Por eso, cree importante la concienciación de las empresas para poner en marcha proyectos que mitiguen sus efectos.
Pero un problema que preocupa especialmente a De Frías es la falta de relevo generacional en las granjas. “Es muy importante empoderar al campo y también a los jóvenes para que se animen a retomar esta actividad”, comenta.
Desde Danone se da apoyo a su sensibilización, así como formación para hacer la transición hacia modelos más regenerativos. Danone cuenta con un plan de descarbonización para reducir los gases hasta un 37% en 2030, y lograr las cero emisiones en 2050. Para conseguirlo, entre otras cosas, está mejorando la alimentación del ganado añadiendo ciertos aditivos que alivian su digestión y así reducen la generación de metano, y también trabaja en la gestión del estiércol. En el área de producción la compañía está desarrollando diseños con menor contenido en material plástico, y el este tiende a ser reciclado y reciclable.
“Hoy todavía existe un problema de circularidad, porque solo el 7% de lo que se pone en el mercado se reutiliza; esto impulsa a repensar la forma de producir, tanto en la utilización de recursos como en cómo se consigue la materia prima”, afirma De Frías.
Esta compañía persigue elaborar productos cada vez más sanos y nutritivos, sin azúcares añadidos, con menos aditivos y con ingredientes más naturales. El motivo, según explica Alejandro de Frías, es que tenemos la responsabilidad de introducir la sostenibilidad en las estrategias corporativas y asumir que el retorno tardará un poquito en llegar. De Frías cree que nos encontramos en mitad de una tempestad en la que, por un lado, tenemos los constantes cambios regulatorios, y por otro, los cambios de hábito de los consumidores. Ello está obligando a las empresas del sector a adaptarse permanentemente. Y todo ello sin olvidar que los tiempos cambian y que es el momento de la Inteligencia Artificial, una herramienta que va a modificar la forma de ver la economía y la gestión de las empresas. En este sentido, Frías está convencido de que vamos a vivir un momento en el que pasaremos de gestionar problemas a coordinar agentes de IA que los enfrenten. Un cambio de paradigma que describe como “brutal”.