Una bajada de tipos de la Fed no debe verse como un triunfo de Trump

Miguel Ángel Valero

La 'resaca' de la reunión de la Fed pone el foco en que su presidente, Jerome Powell, centró su discurso en los efectos de la actual política arancelaria, que son más inflación, menos crecimiento y un potencial incremento en el desempleo. Y en no tiene ninguna prisa en reducir los tipos, ya que considera que el coste de esperar a tener más visibilidad es ínfimo. Con unos datos macroeconómicos que muestran una economía estadounidense resiliente, el temor al efecto inflacionista de las tarifas primó más en esta reunión –los breakeven a 2 años se han incrementado desde el inicio de la guerra tarifaria–. Los mercados esperan que la reducción de tipos se inicie entre la reunión de julio o septiembre, meses en los que, de no haber cambios en la política comercial, se empezará a notar el peso de las tarifas. 

Víctor Álvarez, director de renta variable de Tressis, la sociedad de valores especializada en gestión de patrimonios y planificación financiera, subraya algunas frases "interesantes" del presidente de la Fed. Empezó con un "en apoyo a nuestros objetivos, el Comité Federal de Mercado Abierto decidió dejar sin cambios nuestros tipos de interés de política monetaria", y cuando les tocó el turno a los aranceles declaró que "si se mantienen los grandes aumentos de tarifas que se han anunciado, es probable que generen un aumento de la inflación, una desaceleración del crecimiento económico y un aumento del desempleo". También aseguró que los tipos de interés bajarán en algún momento de este año, pero no a corto plazo, porque "mi instinto me dice que la incertidumbre es extremadamente elevada".

"La Fed se mantiene al margen de las diferentes presiones, eso no es negativo, pero da la sensación de que volverán a llegar tarde. El mercado no cree que vaya a haber bajadas hasta julio, aunque la probabilidad apenas supera el 50%", apunta.
 

Lucía Gutiérrez Mellado, jefa de Estrategia de JP Morgan AM para España y Portugal, cree que la Fed hará dos bajadas de tipos en lo que queda de 2025: una en el verano, y otra a final de año. Y descarta una subida de los tipos.

Luca Paolini, estratega jefe en Pictet AM, subraya que la Reserva Federal tiene necesidad de defender su independencia y las presiones inflacionistas limitan su disposición para recortar tipos de interés, con poco margen para la flexibilización proactiva. Puede centrarse en el debilitamiento de la demanda para actuar con decisión si el mercado laboral muestra claros signos de deterioro, pero estamos cerca del final del ciclo de flexibilización, con solo dos recortes de tipos de 0,25% en junio y en diciembre, para una tasa terminal de 3,75 a 4%, con riesgos al alza, dadas las expectativas de una política fiscal más laxa.

David Macià, director de Inversiones y Estrategia de Mercados de Creand Asset Management en Andorra, resalta que es la tercera reunión seguida sin cambios de la Fed, ya que se han elevado los riesgos de que tanto el desempleo como la inflación empeoren. "El elevado nivel de incertidumbre les mantiene alerta, dispuestos a responder a una y otra cosa, cuando sea necesario. Los mercados creen que deberán recortar tipos hasta tres veces en lo que queda de año. Pero ni se inmutaron ante una reunión que se antojaba irrelevante. Los titulares de acuerdos y desacuerdos al respecto de los aranceles es lo que los mueve estos días", apunta.

"En un entorno en el que los aranceles pueden llevar a una mayor inflación, a la vez que reducir la actividad económica, el dilema es evidente. Ante la duda, la Fed no bajará los tipos, salvo que la desaceleración económica sea evidente. La herramienta más poderosa de un banco central probablemente no sea ni la capacidad de fijar tipos de interés ni la de 'crear' dinero, sino su credibilidad. Las amenazas de Trump, que consideró incluso cesar a Powell -algo que ni siquiera parece legalmente posible-, consiguen de hecho lo contrario de lo que pretenden: la Fed tiene que asegurarse que una reducción de la tasa de interés no se interprete como una concesión al presidente", subraya.

Por su parte, Christian Scherrmann, Economista Jefe para Estados Unidos de DWS, avisa que "la incertidumbre aumenta". La Fed mantuvo los tipos de interés sin cambios en el 4,25%-4,5%, ya que "la incertidumbre sobre las perspectivas económicas ha aumentado aún más» y «los riesgos de un mayor desempleo e inflación han aumentado". El presidente de la Fed, Powell, reiteró que no tienen prisa por cambiar la política monetaria y pueden responder, según sea necesario. Señaló que los aranceles actuales podrían conducir a una mayor inflación, a un menor crecimiento y a un mayor desempleo si se mantienen. "En esencia, el presidente Powell reiteró declaraciones anteriores, ya que las aportaciones clave a la política monetaria -el gasto fiscal y los aranceles- siguen sin ofrecer una orientación clara", subraya.

"Como esperábamos, es probable que esperar y ver siga siendo la estrategia dominante. Recientemente, el banco central ha sido objeto de un nuevo escrutinio por repetir probablemente el error que cometió durante la pandemia: esperar demasiado para ajustar la política monetaria. Por ahora, pensamos que es poco probable que se enfrente a un choque de oferta similar al de la pandemia, por no hablar del exceso de demanda derivado de la política fiscal. Creemos que la Fed se mantendrá en una ´pausa hawkish´ hasta que se cumplan dos condiciones: en primer lugar, que los aranceles no desencadenen de hecho un efecto de segunda ronda, más allá del cambio puntual en el nivel de precios y, en segundo lugar, que la demanda y la mano de obra se hayan enfriado lo suficiente como para formular expectativas desinflacionistas".

Franklin Templeton lanza un ETF sobre grandes empresas de EEUU

En este escenario, la gestora Franklin Templeton pone a disposición de los inversores españoles el Franklin US Mega Cap 100 UCITS ETF, diseñado para proporcionar una exposición específica a las 100 compañías de mayor capitalización de EEUU. Este producto se suma a la gama de 28 ETF de la gestora, de los que cinco tienen exposición directa a renta variable estadounidense.

El ETF cotizará en la Deutsche Börse Xetra (XETRA) desde el 8 de mayo, y un día después enla Bolsa de Londres (LSE), en Euronext París y en la Borsa Italiana. Además, el vehículo está registrado en Alemania, Austria, Dinamarca, España, Finlandia, Francia, Irlanda (donde está  domiciliado), Italia, Luxemburgo, Países Bajos, Reino Unido y Suecia.

Este nuevo ETF replicará el Solactive US Mega Cap 100 Select Index3, que se comporta según el rendimiento de las 100 mayores empresas del Solactive GBS United States 500 Index. La selección se basa en la capitalización total del mercado, excluyendo compañías armamentísticas. Al ponderar las compañías en función de su capitalización bursátil (free-float), el índice pretende garantizar una amplia representación del mercado, manteniendo al mismo tiempo la diversificación.

Caroline Baron, responsable de distribución de ETF para EMEA de Franklin Templeton, comenta: “Desde hace 30 años, los 100 mayores valores de renta variable estadounidense han registrado mayores subidas que un índice más amplio como el S&P 500. Este ETF puede ser utilizado por los inversores como una herramienta ágil para aumentar la exposición al mercado de renta variable de EE.UU. o implementar rápidamente una operación que asuma un mayor nivel de riesgo, ofreciendo un perfil de riesgo-rentabilidad distinto”.

El nuevo ETF se centrará en los 100 valores de mayor capitalización de EEUU, que históricamente han superado a los índices más amplios. Proporcionará una herramienta estratégica a los inversores para sobre ponderar las compañías con mayor potencial de crecimiento en el mercado estadounidense. Y ofrece una solución rentable para acceder a los principales valores de mega capitalización de EEUU, con una ratio total de gastos (TER) del 0.09%.