Luis Blanc, managing director de Dividend Refund.
Según un estudio de la Comisión Europea, los inversores incurren en costes por valor de 4.800 millones€ al año en desgravación fiscal no percibida. Esta estimación se debe principalmente a la falta de homogeneización y a lacomplejidad de los procedimientos de solicitud de devolución de retención.
Cada vez que un inversor recibe dividendos o cupones extranjeros tributa en origen y en su país de residencia fiscal. La diversidad regulatoria y los procedimientos complejos dificultan la recuperación del exceso de retención, tanto para IIC como para inversores particulares, mermando considerablemente, para los casos sin reclamar, la rentabilidad de las inversiones.
Los procedimientos de recuperación largos e ineficientes pueden generar costes financieros directos, costes de oportunidad y pérdida de beneficios fiscales. Algunos países aplican tasas de retención de hasta el 35% que, sumada a la retención en España hacen que más del 50% del dividendo se lo lleven las arcas públicas.
En el caso de las inversiones transfronterizas, muchos Estados miembros gravan con retenciones en fuente los dividendos y los intereses de los bonos pagados a inversores que residen en el extranjero. Sin embargo, los inversores siguen estando obligados a pagar el impuesto sobre la renta en su país de residencia por los mismos ingresos y, a menudo, deben presentar una solicitud de devolución del impuesto pagado en exceso. En la actualidad, estos procedimientos de devolución suelen ser largos, costosos y engorrosos, lo que frustra a los inversores y desalienta las inversiones transfronterizas dentro de la UE y hacia ella. Además, escándalos como los de Cum/Ex y Cum/Cum han puesto de manifiesto que estos procedimientos de devolución pueden ser objeto de abuso. Por ejemplo, se estima que este tipo de fraude ha provocado pérdidas por valor de 150.000 millones€ entre 2000 y 2020 en un determinado grupo de Estados miembros.
Normativa FASTER
La Directiva FASTER (Financial Accountancy Standard for Tax Exemptions and Refunds) pretende agilizar las devoluciones de doble retención fiscal dentro dela Unión Europea y fortalecer los procedimientos contra el fraude fiscal relacionado con dividendos. El inicio de su aplicación se prevé el 1 de enero de 2030.Bajo esta normativa, los Estados Miembros deberán implementar los procedimientos de devolución del exceso de doble imposición sobre dividendos de acciones y bonos emitidos en su jurisdicción, mediante:
En conclusión, la directiva Faster simplificará la solicitud de devolución de doble imposición en dividendos y cupones, pero a la vez se introducirán medidas de control digital complejas que harán que en la práctica estas reclamaciones sólo podrán ser procesadas por operadores especializados que estén homologados por la UE y cuenten con los medios tecnológicos necesarios.